En un estudio reciente (diciembre de 2021) financiado por el NIH (Instituto Nacional de Salud) y publicado en la revista médica Medicina natural, Los investigadores capturaron más de 1.000 horas de imágenes cerebrales de pacientes con trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) grave. Los datos obtenidos durante este estudio servirán para comprender con más detalle qué puede desencadenar un episodio de TOC y mejorar su tratamiento en el futuro.
Adquirir más conocimientos sobre lo que, en el mejor de los casos, puede ser una enfermedad ligeramente irritante y, en el peor, devastadoramente debilitante, nunca ha sido tan vital, ya que el número de personas que padecen TOC (junto con la mayoría de las demás enfermedades mentales) ha aumentado desde el inicio de la pandemia de COVID, lo que no es de extrañar si se tiene en cuenta que el mundo se ha enfrentado a un virus fácilmente transmisible que se ha apoderado de los ciclos de noticias mundiales como un vicio y ha dejado a muchas personas aisladas y sin acceso a ayuda.
¿Qué es el TOC?
El trastorno obsesivo compulsivo, comúnmente denominado TOC, es una enfermedad psicológica crónica, clasificada como trastorno de ansiedad y definida por pensamientos obsesivos recurrentes y hábitos compulsivos repetitivos, o una combinación de ambos.
Algunas personas creen erróneamente que todo consiste en lavarse las manos repetidamente o comprobar dos veces que se ha cerrado la puerta. Aunque esto puede ser cierto para algunos, la realidad es a menudo mucho peor y puede tener un efecto perjudicial en una persona y en su forma de funcionar.
Algunos afectados sufren obsesiones frecuentes, intrusivas y persistentes, y otros se ven obligados a repetir o duplicar comportamientos y acciones, a menudo para obtener una sensación de control o eliminar los pensamientos indeseados y desagradables.
Algunos de los pensamientos/obsesiones más comunes son -
Algunas compulsiones frecuentes son
Se cree que alrededor del 2% de la población mundial padece TOC en algún momento de su vida. Es típico que los síntomas comiencen en la infancia o la adolescencia, y para más de la mitad de los afectados tendrá una influencia grave e incapacitante en su vida diaria, causando problemas con las relaciones, el mantenimiento de un trabajo y, en algunos casos, incluso afectando a su capacidad para vestirse o alimentarse por sí mismos. Más de 50% de los afectados por el TOC experimentan ideación suicida, y 15% intentan suicidarse.
Tratamiento para TOC (trastorno obsesivo-compulsivo)
Aunque históricamente se creía que el TOC era bastante infrecuente, en la actualidad se considera uno de los diez trastornos psiquiátricos más frecuentes (también se incluyen en la lista la drogadicción, la depresión, la ansiedad general, la alimentación y el estrés postraumático).
A lo largo de los años, a medida que se ha investigado más y se han hecho más descubrimientos, el tratamiento del TOC ha cambiado. Actualmente, los tres métodos más reconocidos son la terapia, la medicación y la estimulación cerebral.
La exposición y prevención de respuesta (EPR) es un tipo de terapia cognitivo-conductual (TCC) que suele utilizarse en el tratamiento del TOC. La EPR expone gradualmente a los individuos a situaciones diseñadas para provocar sus obsesiones en un entorno seguro. De este modo, el paciente desarrolla habilidades de afrontamiento para poder enfrentarse a una situación desencadenante cuando se presente en su vida cotidiana y liberar al individuo del ciclo de obsesión y compulsión.Este enfoque terapéutico se combina a menudo con una medicación que contrarresta la depresión o la ansiedad.
La clomipramina (un antidepresivo tricíclico) se ha utilizado para tratar el TOC desde su descubrimiento en 1964; sin embargo, algunos pacientes se quejan de somnolencia y aturdimiento y, en ciertos casos, puede causar otros efectos secundarios más graves, como alucinaciones y psicosis. La introducción de los antidepresivos ISRS a finales de la década de 1980 supuso un gran avance y rápidamente se convirtieron en un tratamiento muy popular, ya que su uso es más seguro.
Estimulación cerebral: en el pasado, la única forma de realizar una terapia de estimulación cerebral era implantar quirúrgicamente electrodos dentro del cerebro de la persona. Este tipo de terapia se sigue utilizando en casos graves y, de hecho, es la forma en que los investigadores de la Medicina natural estudio obtuvo las fotos. Es comprensible que este tratamiento tenga varias limitaciones, como la invasividad de la cirugía necesaria y el coste.
En 2018, la FDA aprobó una intervención para el TOC llamada estimulación magnética transcraneal (EMT), una forma no invasiva de terapia de estimulación cerebral que utiliza ondas magnéticas para enviar un pulso eléctrico de corta duración al cerebro, donde estimula las neuronas (células nerviosas). Los tratamientos con EMT también han sido aprobados por el NICE para su uso en el Reino Unido.
Tratamiento del TOC (trastorno obsesivo-compulsivo) en nuestro centre en España
¿La pandemia ha afectado a su salud mental? ¿Sus obsesiones se están apoderando de su vida? ¿O tal vez le preocupa que sus compulsiones estén fuera de control?
Aquí, en nuestro lujoso centro de tratamiento de salud mental en Ibiza, España, contamos con un equipo de personal altamente cualificado con experiencia en el tratamiento del TOC, ansiedad, depresión, adicción a sustancias y trastornos del comportamiento.
Ofrecemos TMS (estimulación magnética transcraneal) in situ como parte de nuestro programa terapéutico, junto con la terapia asistida por caballos, y varios enfoques más convencionales para el tratamiento de la adicción y los trastornos de salud mental, como el asesoramiento individual y de grupo, CBT (terapia cognitivo-conductual) y EMDR.
Para obtener información sobre todas las terapias que ofrecemos en nuestro centro de tratamiento de salud mental en España, y detalles sobre las admisiones, póngase en contacto con sharon@ibizacalm.com